Lagunas vitales

Biólogos de la UNSJ estudian el Parque Provincial “Presidente Sarmiento” para caracterizar las comunidades y dinámica de aves y crear conciencia del cuidado que requiere el lugar, que es un área protegida. “La pérdida de lagunas en este lugar ha generado la disminución de los ensambles de aves”, alertan.

 

Por Belén Ceballos
febrero 2017 pato zambullidor chico Oxyura vittata macho y hembra
Pato zambullidor chico Oxyura Vittata, macho y hembra.

El equipo de investigación encabezado por la bióloga Grisel Ortiz, directora, y su codirector José Villavicencio, desarrollan el proyecto “Impacto, por la pérdida de lagunas, sobre las aves del Parque Provincial ‘Presidente Sarmiento’, en el marco de la ecología periurbana y rural. Departamento Zonda”. En el trabajo, realizado en la Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de la UNSJ, Ortiz explica que la pérdida de lagunas en este lugar ha traído como consecuencia la disminución de los ensambles de aves, en especial de aquellas que están vinculadas con el ambiente acuático y constituyen una de las riquezas más importantes de esta área. La zona es un ambiente árido y la presencia de agua constituye un elemento de atracción muy importante para las aves y las que son acuáticas están cumpliendo sus ciclos vitales completos en este sitio. Además, la investigadora agregó que desde hace unos años la sequía y pérdida de cuerpos lagunares trajo como consecuencia la disminución de las riquezas de especies, quedando solamente aves de ambiente de montes.
Los terrenos donde se ubica el Parque “Presidente Sarmiento” están situados en el valle Ullum- Zonda. Este lugar tiene como característica hidrogeológica que posee una cuenca sedimentaria con un espesor de relleno aluvial superior a los mil metros. Las elevadas permeabilidades y transmisividades de los depósitos mencionados se refleja en la rápida respuesta de los niveles de agua subterránea ante cualquier variación en las condiciones de descarga recarga que tiene lugar, principalmente a lo largo del Río San Juan.
El Parque Provincial Sarmiento fue declarado por Ley provincial Área protegida, en 1980. En sus orígenes fue creado con la intención de ayudar al balance ecológico, ser una zona de esparcimiento, que fuera estudiada por la riqueza de la flora y fauna que posee y con fines de conservación. José Villavicencio explicó que “la ecología urbana y periurbana, refiere al estudio de patrones y procesos ecológicos, es un ambiente humano (sistema urbano) en el que hay interrelación entre la flora y la fauna y puede ser estudiado por el hombre. San Juan tiene la particularidad de ser una zona árida donde los sistemas de lagunas son casi inexistentes en las cercanías de la ciudad. En el caso del Parque Sarmiento se encuentra a 20 km de la ciudad, por lo tanto, resultó muy necesario que se lo declarara sitio protegido. En el año 1980 se reservaron 450 hectáreas y más tarde, en 2005, a partir de una reforma en la legislación provincial se extendió la protección a 748 hectáreas.DICIEMBRE 2016 SEQUÍA II
Grisel Ortíz destacó que la principal diversidad faunística en dicha área protegida es representada por un importante ensamble de aves, particularmente se destacan, en este ambiente de aridez, las aves estrictamente acuáticas, quienes encontraron en este humedal el sitio adecuado para cumplir sus ciclos vitales completos y ser observadas, estudiadas y protegidas junto con el resto de seres vivos que forman parte de este rico humedal.
Actualmente, a raíz de largos años de sequía, se redujeron los cuerpos de agua de manera notoria, por lo que se observa una marcada disminución de los ensambles de aves, en especial las estrictamente acuáticas. Durante períodos de humedad, la cantidad de especies asciende a 83. En momentos de disminución de los cuerpos lagunares, por sequía, se observan 39 especies.
“Es importante resaltar que la pérdida de los hábitats es la principal causa de extinción de especies, por lo tanto, si se pierde un sistema lagunar en una zona árida donde las especies cumplen sus ciclos vitales, se extinguen poblaciones locales. Es por eso que no solo se persigue cuidar a las aves sino el estudio y cuidado de todo un sistema”, concluyeron los investigadores.

En el humedal de Zonda, en momentos de sequía, se observa una marcada disminución de especies, especialmente de las aves acuáticas. Las que pueden enconstrarse en esos momentos son: Anas Georgica, Milvago chimango, Angelaiusthilius, Columba maculosa, Anasflavirostris, Vaneluschilensis, Zenaida auriculata, Himantopusmelanurus, Molothrusbonariensis, Tyrannussavana, FullicaLeucoptera, Guiraguira, Oxyuravittata, Coragypsatratus, Pitangussulphuratus, Falco sparverius, Nycticoraxnycticorax, Phytotoma rutilla, Himantopusmexicanus, Hymenopsperpicillata, Nettapeposaca, Anascyanoptera, Columbia livia, Cygnusmelancoryphus, Embernagraplanensis, Lophospinguspusillus, Cistothorusplatensis, Phleocryptesmelanops, Fumariusrufus, Egrettathula, Caracaraplanous, Falacrocoraxbrasiliensis, Aeronautesandecolus, Machetornisrixosa, Anasbahamensis, Sicalissip, Spiziapteryx, Fullicassp, Mimussaturninus.

 

 


octubre/73, edición Nº 32, Año V, julio de 2017