Una realidad que no es reflejada sino construida

[PERIODISMO Y GÉNERO] ¿Es posible que una mirada de género basada en la equidad y el respecto a los derechos atraviese todos los temas que se tratan en los medios de comunicación?

 

Por Fernanda Borcosque

Los medios de comunicación no reflejan la realidad, la construyen: enfocan la atención pública en ciertos temas, establecen qué y cómo pensar sobre determinados asuntos. El modo en que problematizan y se presentan las noticias, definen colectivamente la cuestión tratada. Y el tema de género y todo lo que ello involucra, no es la excepción.
Al incurrir en prácticas periodísticas que vulneran derechos de mujeres, niñas y adolescentes, los medios actúan desconociendo que son los actores centrales para “combatir” contenidos discriminatorios, como señala la Ley 26.485 de Protección Integral a las Mujeres. Allí se establece que, por ejemplo, la violencia mediática es aquella que publica o difunde imágenes o mensajes estereotipados que de manera directa o indirecta, promuevan la explotación de mujeres o sus imágenes, injurien, difamen, discriminen, deshonren, humillen o atenten contra la dignidad de las mujeres, y que también legitimen la desigualdad de trato o construyan patrones socioculturales reproductores de la desigualdad o generadores de violencia contra las mujeres.

Estrategias de crueldad
¿Cómo construyen los medios las noticias sobre femicidio y otras violencias relacionadas con el género? La docente e investigadora en comunicación, Paola Ingrassia, explica: “Existen estrategias discursivas con las que la prensa refuerza y naturaliza las inequidades existentes entre varones y mujeres en la sociedad patriarcal actual. Desde la denuncia por abuso que hizo la actriz Thelma Fardín contra Juan Darthés en diciembre de 2018, se observan algunos avances en el tratamiento noticioso de las problemáticas de género, sobre todo en los medios de alcance nacional. Sin embargo, todavía persisten enfoques y tratamientos machistas que revictimizan a las víctimas de violencia de género. A nivel local los abordajes mediáticos son el fiel reflejo de lo que Rita Segato define como el ‘brazo ideológico de la estrategia de la crueldad’, con algunas notables excepciones, por supuesto. Es decir, el modo en que se presentan las noticias reduce o anula la empatía con las víctimas, naturalizando las muertes de mujeres en manos de los hombres. Las víctimas son revictimizadas a través de la banalidad y la espectacularización. Además, el femicidio se construye como hecho aislado, propio del ámbito privado. Por lo tanto los encuadres periodísticos no reflejan el peligro social que conlleva la violencia de género ni la necesaria reflexión sobre la ausencia de políticas públicas y responsabilidad estatal en ese ámbito. Tampoco se registran informaciones que sirvan para ayudar a posibles víctimas de violencia ni a sus familiares.”.

Un relato diferente, equitativo
Desde distintos espacios académicos, organizaciones y redes de profesionales se pone en cuestión el periodismo considerado “patriarcal, estigmatizante, sin equidad de género” y se promueve que los medios incluyan la perspectiva de género en los contenidos e informaciones que difunden. Pero ¿qué es comunicar con perspectiva de género? Marcela Silva, periodista de un medio audiovisual y editora del portal de noticias 911mujer, lo explica: “Comunicar con perspectiva de género es contar algo desde una óptica diferente que tiene en cuenta no solo la desigualdad que existe entre hombres y mujeres, sino también desde una perspectiva que denuncia los modos de construir y pensar las identidades sexuales desde una concepción de heterosexualidad normativa y obligatoria que excluye. Es decir, favorecer la igualdad entre los géneros y la eliminación de estereotipos que afecten la dignidad o que marquen la supremacía de uno sobre el otro”. Y agrega, “si tuviera que decir qué es comunicar con falta de perspectiva diría que es cuando hay falta de precisión de datos relevados, el enfoque sensacionalista, la descripción excesiva del desarrollo del crimen y la falta de contextualización”.
Con el objetivo de deconstruir estas prácticas periodísticas “naturalizadas”, un grupo de profesionales de la comunicación creó la Red de Comunicadorxs con Perspectiva de Género, Recope, Esta red que se constituyó para promover coberturas y noticias con mirada de género, surgió en el marco del debate nacional que se dio en 2018 por la Campaña por la Legalización del Aborto, pero también para acompañar situaciones de violencia de género en el ámbito laboral que ocurren en medios de comunicación locales. “Vimos la necesidad de hacer trabajos de reflexión e incidencia con trabajadoras y trabajadores de la comunicación que viven la desigualdad basada en el género, sobre todo en los medios locales”, relata Gabriela Lucero, docente, investigadora y militante feminista. Recientemente, esta Red convocó a trabajadores/as de la comunicación para estudiar la implementación a nivel local de un protocolo de actuación en casos de violencia de género o laboral en los medios.

Agenda urgente
Respecto de si se puede lograr una agenda de género en los diarios locales, la periodista Marcela Silva considera que sí es posible. “De hecho, hay algunos medios que han empezado a incorporar temas que tienen que ver con el género en diferentes aspectos y no solo con la violencia. Es más, muchos diarios digitales cambiaron hasta su manera de tratar este tipo de noticias. Creo que falta aún cierta apertura y preparación en esta temática por partes de los comunicadores, pero en varios encuentros y reuniones he notado que hay un interés en, al menos, escuchar y saber de qué se trata”, dice la periodista.
Alguien que “advierta” sobre la perspectiva de género en las noticias antes de ser difundidas, ¿ayudaría? Algunos medios nacionales e internacionales ya incorporaron en sus redacciones a la editora de género, cuya función es promover la igualdad o paridad de género en el tratamiento de la información. Aunque cree que es posible que los medios locales incorporen esta editora, Silva considera que “la realidad de los medios locales es completamente diferente a la de los nacionales. En una redacción de la provincia a veces tenés un solo periodista para renovar una portada y frente a ese panorama de precarización y ausencia sindical lo veo muy alejado”.
Los estudios realizados por Paola Ingrassia arrojan una ausencia de especialistas en la materia. “Esta carencia generalmente se atribuye a la falta de tiempo, propia de rutinas periodísticas sobreexigidas. Hay que consolidar en la provincia un periodismo especializado, que rompa con los estereotipos, simplificaciones y frivolizaciones que caracterizan a sus tratamientos. En definitiva, apunto a la urgencia de suscitar discursos periodísticos basados en el respeto a los derechos de la mujer destinados a conseguir la equidad social”, dice la investigadora.

De la investigación a la acción
El Observatorio de Medios, que funciona en el ámbito del Departamento de Ciencias de la Comunicación (de la FACSO), se ocupa del estudio de noticias sobre niños, niñas y adolescentes. Este Observatorio fue la base para pensar un espacio que promoviera contenidos comunicacionales con enfoque de género transversales a distintas temáticas. Así se creó la cátedra Comunicación con enfoque de género. “Vimos que no podíamos quedarnos solamente con la reflexión crítica, sino que debíamos generar una instancia que permitiera formarnos y producir otros tipos de contenidos. Es un desafío que tenemos como comunicadores: promover un enfoque de derechos humanos con perspectiva de género”, dice Gabriela Lucero. //


Perteneciente a octubre/73: edición Nº43, año VII. Noviembre de 2019