Hacia una empresa naturista y didáctica
Un grupo de ingenieros fue premiado por dos proyectos, en “Capital Semilla” y Jóvenes Emprendedores Rurales”, y lograron concretar dos grandes anhelos, ser proveedores de zumos de brotes ecológicos y diseñadores de juguetes para chicos con discapacidad.
Por Belén Ceballos
Mabel del Valle Rago, Ingeniera Industrial, Cristian Ponce, estudiante avanzado de Ingeniería Electrónica, Hernán Jofré, Ingeniero Electrónico y Ximena Rojo, artesana y técnica en Artes Industriales fueron los ganadores del certamen “Jóvenes Emprendedores Rurales”, con el proyecto “Elaboración y comercialización de zumo de brotes ecológicos”. Esta idea surgió a partir de la inquietud de un profesor, quien se quedó sin poder arrendar unas tierras desde las que abastecía al mercado de brotes. A partir de esto, les propuso desarrollar una máquina que pudiera reemplazar al cultivo hidropónico. Para esto colocaron esponjas con roseadores en una pequeña porción de tierra orgánica cuyas raíces crecieron aferrándose y cuando alcanzaron cierto tamaño se las cortan.
Así las cosas, diseñaron una germinadora que trabaja totalmente automatizada con controladores y sin usar sustrato sino directamente agua. El proceso de fabricación es totalmente ecológico ya que se usan semillas orgánicas, y una vez finalizado los desechos se separan y dejan para compostaje, útiles en huertas orgánicas.
Las semillas orgánicas no tienen ningún tipo de químico, insecticida, es decir no tienen ningún tratamiento artificial para conservarlas.
Lo interesante de este sistema es que el cultivo tradicional en tierra aprovecha el 70% de las semillas, el otro 30% no llega a abrir porque la tierra lo tapa y se pierde. En cambio, en la hidroponia se aprovecha alrededor de un 80% de las semillas y en especial con esta máquina germinadora se ha logrado aprovechar casi un 90%. El objetivo es lograr que, cuando esté en total funcionamiento y ajustados todos los parámetros, utilice la cantidad justa de agua y haga un consumo mínimo de energía. El equipo de trabajo, para armar la máquina recicló el casco de una heladera vieja y fue dentro de ella que se realizó el experimento.
En el certamen fueron distinguidos por la innovación e idea ecológica. Otra arista positiva de este proyecto es que se utilizarán insumos de la provincia, lo cual resalta la importancia de este emprendimiento y su demanda en el mercado local.
Además, también será muy importante socialmente ya que colaborará con la tendencia actual que apunta hacia lo natural y la alimentación sana.
“Fabricación de juegos didácticos para personas con discapacidad”
Este equipo también obtuvo financiación desde “Capital Semilla” por un proyecto para diseñar juegos didácticos para chicos ciegos y sordos. Esta idea surgió a partir de la inquietud de uno de ellos que tiene una hermana con discapacidad, y conocía la inexistencia de juegos didácticos en los centros de rehabilitación.
Se propusieron diseñar: memotest, juegos de distintas texturas, en especial apuntando al sistema braile, juguetes que tengan luces y sonidos, enhebrados, de encastre y de ingenio.
En un primer momento, se pensó usar solo madera para realizar el diseño, pero luego se determinó que sería mejor probar con otros materiales como plástico, resina, gomas para poder trabajar con luces de led y sonidos para darle vida a estos juegos.
El objetivo perseguido apunta a que estos juguetes sean donados a colegios de chicos con discapacidad y jardines en general, con la intención de apuntar a la estimulación temprana. Por otra parte, es un proyecto cuya intención es terminar con la falta de oferta que hay en la provincia, ya que los docentes tienen que viajar a Buenos Aires para conseguirlos. Además, se pretenderá bajar el costo del producto porque tienen un valor casi un 400% más que los otros juguetes.
El plazo para realizar ambos proyectos es de 5 años y todos coinciden en que las ganas, la capacidad y el entusiasmo están, solo resta obtener los fondos para concretar ambas propuestas.
Edición correspondiente a octubre/73 – Año III – Nº 24 – Diciembre de 2015