Mujer activa, cultura viva

Este fue el lema del 1° Encuentro de tejedoras aborígenes que se realizó en Villa San Agustín, Valle Fértil, durante los días 23 y 24 de abril.

Por Belén Ceballos

“Entre las consejas de los mayores y de los indios huarpes, de los que yo provengo, y de las reuniones de fogón, aprendí la cultura americana, porque no frecuenté aulas. Aprendí la voz popular en que creíamos”, estas palabras del poeta Armando Tejada Gómez marcaron la importancia del encuentro.
Telares criollos e industriales, mantas, gorros, llaveros, ponchos, acolchados, productos regionales, lanas teñidas con tinturas naturales y artificiales, fueron los protagonistas de una jornada de intercambio cultural. La plaza principal de San Agustín fue la elegida como centro del encuentro de las tejedoras indígenas que se dieron cita en Valle Fértil. El objetivo principal fue exhibir los productos realizados por cada una de ellas e intercambiar saberes y experiencias.
Esta actividad fue organizada por la Dirección de Pueblos Originarios del Departamento Valle Fértil y contó con el apoyo y acompañamiento del Programa Universitario de Asuntos Indígenas, que pertenece a la Facultad de Filosofía, Humanidades y Artes, quien adhirió a la actividad y participó dando una charla sobre los derechos de las mujeres aborígenes.
Tejedoras del ValleCarina Calivar, es referente de la comunidad “Cacique Caligua” y directora de Pueblos Originarios. Para ella este encuentro que reunió tejedoras Huarpe y Diaguita, logró que se encontraran tejiendo la trama indígena y el lema se vio reflejado en esta plaza, donde hubo mujeres grandes y jóvenes, quienes no suelen salir habitualmente de sus casas o puestos y, sin embargo, estuvieron allí valorando su trabajo y valorándose como hacedoras de cultura. Por lo tanto, el compromiso y la responsabilidad que asumió es mayor ya que debe representarlas y acompañarlas para que esto se siga replicando y no se deje de hacer.
El encuentro también contó con la presencia de Olga Sulca, quien llegó desde Amaicha del Valle, Tucumán, para compartir las experiencias de las tejedoras Diaguita-Calchaquíes, que forman parte de los valles Calchaquíes.
En Tucumán se organizaron porque se dieron cuenta de que los jóvenes y niños no se interesaban por el hilado y el tejido, y temieron que eso lo haría desaparecer. Por lo tanto, en el año 2009, organizaron junto a la Universidad de Tucumán, el primer encuentro de tejedoras indígenas. El objetivo principal fue difundir las técnicas de hilado, tejido, teñido de hilos, para que se propagara la técnica y no se perdiera. Al respecto, agregó Sulca, el conquistador no pudo sacar del tejido las técnicas, estas son las únicas que han resistido a los diferentes procesos históricos.
Luego de esta charla, cada una de las tejedoras compartió las técnicas que utilizaba. Fue un intercambio enriquecedor ya que pudieron contar cómo trabajan y llevarse nuevos modos de hacer y pensar al tejido y sus formas.
Esta actividad no fue la única que se realizó en Valle Fértil: desde el 19 al 25 de abril se conmemoró la Semana de los Pueblos Indígenas, con actividades como: pintados de murales a cargo de los alumnos de la Escuela Pbro. Cayetano de Quiroga, música con artistas del lugar, charlas sobre diferentes problemáticas que involucran a las comunidades.
Tejedoras del Valle en la plazaTal como se esperaba, este fue el puntapié para futuros encuentros de los Pueblos Originarios de Valle Fértil. En julio, se realizará una jornada con las tejedoras y los turistas que visiten el departamento. En agosto, se convocará a los artesanos indígenas que trabajan con cuero y, a fin de año, se hará el cierre, en el que se convocará a todos los que participaron de estas actividades.
Los pueblos indígenas de Valle Fértil empiezan a recorrer un nuevo camino que les reconoce derechos y permite afianzar su lucha. Es un gran paso contar con el apoyo de una Dirección, representada por una referente Diaguita. Ahora sólo queda seguir y estimular a los más jóvenes para que se animen a continuar esta tarea. //


 

Edición correspondiente a octubre/73 – Año IV – Nº 26 – Mayo de 2016