¿Competencias o talentos?

Escribe Oscar Nasisi, rector de la UNSJ


 Editorial: Año IV – Nº 29 -Diciembre de 2016

 

Algunos modelos de educación superior consideran, incluso hoy, que una universidad es exitosa cuando un alto porcentaje de sus egresados consigue trabajo rápidamente. Este es el fundamento de la llamada educación por competencias, que busca desarrollar el concepto de la ocupabilidad como índice de éxito. También es la base que sustenta que la excelencia y la equidad no son compatibles, algo con lo que no estamos de acuerdo: yo diría que nuestra mirada se sitúa en el extremo opuesto.
Entonces, ¿cómo es la universidad que queremos? ¿Cómo es el modelo de educación superior que debería quedar plasmado en una futura ley, como paraguas de un paradigma de universidad necesaria? En pocas palabras, creemos en una universidad que prepare para el uso inteligente de la información, que permita la libertad de expresión, la sensibilidad, el raciocinio y la diversidad en la palabra. Queremos una universidad que forme –es decir, que dé forma- interviniendo desde el corazón del sistema, a través de la acción personal, relacional y social. Una universidad de múltiples dimensiones, que no deseche talentos y que aproveche todos los saberes, para construir desde ellos. Una casa de Altos Estudios presente en la comunidad, que observe y acompañe sin forzar ni invadir, tomando todo aquello que la sociedad posee como conocimiento colectivo, para la construcción de una identidad propia.
La palabra competencias nos remite, inevitablemente, a perdedores y ganadores. Nosotros queremos una universidad donde todos ganen. Donde podamos aprender de los errores, donde las equivocaciones sirvan para querer aprender más y hacerlo mejor.
Creemos en una universidad que forme integralmente, que provoque un cambio de conciencia en la economía, en la política, en la comunicación; que motive a sus futuros profesores, que entusiasme a sus científicos para poner la investigación al servicio de la sociedad, que valore las creaciones de sus artistas como rasgos distintivos de su pueblo. Esa es la UNSJ que queremos. De todos y para todos. Y no bajaremos los brazos en luchar para que sea posible. //

 


Edición Nº 29 – Diciembre de 2016 – Año IV